Guillermo Fischer


Arquitecto colombiano, estudió en la Universidad de los Andes en Bogotá. Posteriormente realizó una Maestría en Arquitectura en la Universidad Nacional de Colombia. Se especializó además en Planeación y Evaluación de la enseñanza, en la Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano en 1987. Particpó en un taller en Arcosanti WorkShop (Paolo Soleri) en Arizona, EUA. Falleció prematuramente el 12 de septiembre de 2023 dejando un gran vacío como persona y destacado profesional.
Arquitectura y autobiografía: Con el madurar como arquitecto y ser humano, he encontrado, tal vez tardíamente, que la creación humana está fuertemente forjada por los eventos de nuestro pasado, algunos negativos, otros positivos, pero cada vez que reviso mi obra, encuentro que el fundamento de mis proyectos son, a veces una reparación del pasado, y otras, un recrear esas experiencias positivas. A través de la presentación de algunas pocas obras y proyectos recientes, se tratará de ver cómo estos conceptos de pertinencia y de lugar han actuado en la concepción del proyecto.

Edificio Aulas de Ciencias Gloria Galeano Gárces
Bogotá, Colombia. 2020
Localizado en el campus de la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá, perteneciente a la Facultad de Ciencias, cuenta con salones para 25, 50 y 100 personas. Así como 2 auditorios con capacidad de 250 personas cada uno.
La intención principal del proyecto es la de generar espacios de encuentro, rompiendo con la tipología común en el campus: Edificios que consisten en crujías alargadas con una circulación central donde las aulas están dispuestas en hilera, ya sea en un solo costado del corredor o en ambos. Esta tipología es similar a la de cárceles y hospitales, espacios que se pueden calificar de alienantes, debido a su carencia de zonas abiertas, de pequeña y de gran escala, para la reunión informal, bajo cubierta de estudiantes y docentes, así con poca o ninguna relación con el entorno natural.
Así, es un edificio compuesto por varias torres que generan espacios de reunión a escala entre ellos, un edificio que permite la fluidez del gran espacio verde continuo que caracteriza el campus y que permite el acceso desde múltiples puntos del mismo. Como la separación de las aulas no implicaba una conformación ortogonal, sino que eran posibles otras formas, se optó por conformar espacios de planta ovalada, directamente relacionados con el útero, lugares donde nos sentimos más abrigados y nutridos que en los ortogonales.










Casa López
Bogotá, Colombia. 2019
Inspirada en la tipología de patio romano entre paramentos, mientras incorpora normativas suburbanas modernas como el antejardín y el voladizo en segundos pisos.
La casa se localiza hacia el máximo del paramento permitido de la cuadra, dejando de esta manera un gran jardín trasero, al cual se abre la fachada posterior, en donde se conservan los antiguos árboles, con una terraza en voladizo en el segundo piso y ventanas correderas de vidrio de piso techo en ambos pisos.







Por otro lado, la fachada hacia la calle protege la actividad interior con un alero en concreto descolgado y una matera en el segundo piso. Y en el primer piso una reja cumple la función de proporcionar una privacidad mayor. Las fachadas laterales, mucho más cerradas, encofradas en zig-zag, cual cortina de origen textil, establecen un juego de luces y sombras durante todo el día.
El patio, el centro geométrico de la casa, conformado por una celosía metálica inspirada en la tradición de las casas mozárabes, donde se pueden entrever no solamente los espacios, sino las personas. En su centro se encuentra un magnolio para su disfrute desde los espacios circundantes. Actúa también como sistema de iluminación de los espacios y como termosifón para la regulación térmica de la casa, por medio de una vidriera corrediza que permite ventilar los espacios a voluntad y establecer una relación directa con el patio.
Wok Cedritos
Bogotá, Colombia. 2015
Este proyecto es construido sobre un lote en donde se encuentran un roble y una araucaria de más de sesenta años y desde un principio la conservación de estos árboles fue una prerrogativa. La construcción del restaurante aprovecha toda el área que la normativa permite, excepto donde se encuentran los arboles. La fachada norte retrocede en forma de ángulo para permitir el libre desarrollo de estos, convirtiéndose así en el gesto principal del edificio.
El lote de forma rectangular tiene dos costados hacia edificaciones de vivienda vecinas y los otros dos, hacia el norte y el oriente, vías publicas. El edificio se cierra sobre la vivienda y se abre hacia las vías en sus fachadas. El restaurante se aloja en el segundo piso, lo que le permite tener visuales de mayor privilegio que el primer piso, en el cual se localizan los servicios y el parqueadero. El acceso del primer piso se conecta con el patio, el cual establece una franca relación espacial con el segundo piso.













Sobre el área de mesas se encuentra una gigantesca lucarna, la cual anima espacialmente esta área, provee iluminación indirecta y es parte del sistema de ventilación natural. El edificio cuenta con sistemas pasivos de control térmico con dos termosifones, la lucarna y el patio. En las fachadas hay un control manual de inyección de aire. La luz y radiación solar son controladas por medio de corta-soles, balaustres y vidriería solar que proveen al usuario del máximo confort sin el uso de energía eléctrica.
Crepes & Waffles Artesano
Bogotá, Colombia. 2013
Un proyecto de pequeño formato: un restaurante de 100 m2, cuyo interés principal no solo es ofrecer el abrigo que se debe dar al comer, sino que sea un espacio donde aparte del gusto, los demás sentidos acompañen al comensal. El proyecto se implanta y constituye el lugar por medio de intervenciones puntuales que afectan profundamente el espacio, para esto se ha pensado en un volumen cuya estructura portante es la misma fachada, como si fuese un canasto invertido, utilizando el concepto constructivo de costillar o balloon frame.
Su fachada esta constituida por medio de un armazón en acero con paneles de madera reclamada, dispuestos de tal manera que insinúen el origen textil de la arquitectura al tiempo que sugieren la idea de abrigo. Esta fachada, con paneles de madera con facetas inclinadas le imprimen dinamismo a la forma estática del volumen, donde las aperturas son el inverso de lo sólido, modulan la forma en que la luz penetra al interior del espacio, en una manera inspirada en la forma en que la luz baña los espacios en la tradición mozárabe, produciendo un juego de luces y sombra al interior, permitiendo atisbar sin ser necesariamente percibido desde el exterior.







Cuando se va a un restaurante, no solo se va a comer, sino a tener una experiencia espacial, que se puede calificar de total, ya que el gusto completa a los otros sentidos que la arquitectura ofrece. Los materiales nobles utilizados, han sido seleccionados por su carácter táctil, buscando la exaltación sensorial. Acompañando esta intención, el proyecto ha sido provisto de vegetación, con una matera perimetral y un muro verde sobre las culatas vecinas, así como del gozo del agua en una pequeña fuente.
La ubicación del restaurante, una suerte de esquina “apéndice”, hace que el volumen sea obligatoriamente percibido por quienes transitan por la vía. Aprovechando esto, y para acentuar la percepción del volumen desde lejos, se hizo que las áreas de servicios, adyacentes a las construcciones vecinas, tuvieran una altura mucho mas baja que el volumen que contiene el comedor, para que este se perciba como forma aislada y rotunda.
Casa en Villa de Leyva
Villa de Leyva, Colombia. 2009
Una casa de descanso para un artista y su familia, una casa de patio, de planta cuadrada, un objeto regular en un medio natural, en un terreno con una ligera pendiente, próximo a la larga montaña en la que se incrusta la laguna sagrada de Iguaque. Esta ubicación genera la idea de la orientación visual principal de la casa: El cono volcánico donde se encuentra la laguna.
Mientras el exterior mantiene la dureza de los blancos muros de las casas de la región, el interior contrasta por la fluidez de los espacios organizados alrededor de los patios, los cuales son fieles a aspectos de la cultura arquitectónica andaluza heredada, como son el agua, los naranjos, las piedras rodadas.
Si el comedor, espacio central de la casa, es un espacio transparente, se produce un flujo direccional ilimitado no controlado, es necesario que esta direccionalidad sea cortada por medio de un muro sobre el patio posterior. Al dejar el comedor abierto sobre el patio que mira a Iguaque, y cerrado hacia el otro, se construye un adelante y un atrás en la casa, lo que define también la zona social y la privada.









