Arquitecto egresado de la Universidad de Los Andes (Bogotá, 1986). Master en Diseño Urbano de la Universidad de Oxford Brookes (1990), con estudios adicionales en el Colegio de Tecnología de Dublín y el Politécnico de Milán. Tras una amplia experiencia profesional establece en conjunto con la arquitecta Marcela Albornoz su taller de arquitectura con el cual desarrollaron significativos proyectos de diseño urbano, arquitectónico e industrial. Posteriormente en el año 2010, establecen tab – taller de arquitectura de bogotá.
En adición al ejercicio profesional en su taller, Daniel Bonilla dedica una significativa parte de su tiempo a la academia.
Edificio 8111
Bogotá, Colombia. 2019
La historia demuestra que la arquitectura y la estructura de una edificación han sido lo mismo por muchos siglos, generando estupendas piezas de edilicias, y tan solo en las últimas décadas estos dos conceptos se han venido desligando, produciendo nuevas oportunidades, pero afectando la relación de integralidad que deberían tener.
En el caso particular de 8111, nos motivó la idea de probar esta fusión, por tanto planteamos un sistema de estructura tipo diagrid, que permite que la estructura sea la expresión de la misma arquitectura debido a las razones que enumeramos a continuación: La primera es que al ser un sistema asociado a diagonales y no a columnas rectas y vigas en entre placas, es mucho más exigente en la forma como se debe integrar estructura y función, en especial para que las diagonales no irrumpan en la flexibilidad del espacio. Por otra parte, la eficiencia de los sistemas de malla diagrid está muy ligada con su aplicación en el perímetro de la edificación, de tal manera que implícitamente se convierten en la misma fachada e imagen de la arquitectura; una imagen muy singular y única pues se distancia de la solución tradicional de pórticos. Otro aspecto particular es su materialidad. Estos sistemas están resueltos principalmente con estructuras metálicas y menos común pero también ampliamente recurrentes, en estructuras de hormigón. Para el caso de 8111 se optó por la segunda solución, es decir hormigón, donde su expresión es más marcada y distintiva, concluyendo en una arquitectura única que consolida y aprovecha de su predominante localización para generar un edificio icónico en la ciudad.
Adicionalmente, el diseño acentuó la singularidad del sistema a través de re-escalar el diagrid de su cuerpo típico que envuelve las oficinas, en contraste con las grandes “V” con que aterriza en su basamento, que son el doble en escala, y permiten además sacar sutilmente el paramento para aprovechar el voladizo permitido por norma. Estas grandes “V” sirvieron igualmente como solución a la solicitud del cliente por lograr una buena visibilidad de los locales comerciales en primer piso, pero terminaron convirtiéndose en una característica única del diagrid de 8111.
El desarrollo de un proyecto complejo como 8111 requiere de la integración de un grupo multidisciplinario de expertos capaz no solo de trabajar en equipo sino de entender los objetivos estratégicos del propietario y su visión de negocio. En 8111 se buscó diseñar un edificio que maximizara las opciones de oficinas y locales con diferentes áreas, que permitiera ajustar fácilmente sus espacios de acuerdo a las cambiantes necesidades del mercado, que brindara altos estándares de calidad y confort a sus arrendatarios, y que contara con especificaciones técnicas, equipos, y sistemas enfocados a la optimización de gastos operativos en el largo plazo. La gerencia concentró su esfuerzo en conformar a un grupo idóneo de firmas profesionales, asesorarse de sus recomendaciones, y guiar al equipo interdisciplinario con una visión clara que permitiera alcanzar los objetivos del propietario. El equipo pudo abordar exitosamente todos los retos y oportunidades de diseño, construcción, y logística que presentaba el proyecto ubicado en uno de los mejores mercados inmobiliarios de la ciudad.
Utilizar una solución arquitectónica-estructural no convencional brinda retos particulares, aporta en el conocimiento de nuevas técnicas o alternativas, y genera grandes desafíos para cada uno de los involucrados en el desarrollo del proyecto.
Área: 19,000m²
Fecha de construcción: 2016 – 2019
Diseño arquitectónico: Taller de Arquitectura de Bogotá S.A.S, Arquitectos Daniel Bonilla y Marcela Albornoz
Ubicación: Bogotá, Colombia – Calle 81 #11-08
Fotografías: Pequeño Robot – Alejandro Arango
MACARENA 626
Bogotá, Colombia. 2019
Rodeado de edificios de invaluable valor arquitectónico, en un lugar privilegiado de la ciudad, se encuentra el edificio Serrano, que nació de entender la morfología y materialidad del sector. El instintivo primer trazo circular se modificó durante el proceso de diseño hasta convertirse en una planta poligonal, conformada por cuatro planos principales.
El volumen principal, conformado por una cubierta inclinada y los planos irregulares del polígono conforman una morfología pétrea que se eleva del suelo, sobre un primer piso acristalado, que se abre sobre la calle. Las inclinaciones de la cubierta buscan resaltar los valores de la topografía inclinada tan típica de Bogotá y presente en el predio del proyecto. Para responder a estos cambios de nivel el proyecto plantea una serie de terrazas y plataformas que buscan crear un primer piso inclusivo y lleno de vida.
El primer nivel acristalado soporta un segundo piso pétreo que se rompe en su interior con grandes patios desde los cuales se establece una relación con el verde y con el cielo. El cielo y el paisaje son enmarcados por unas pirámides truncadas que aparecen en la cubierta, donde cada volumen funciona como un marco para el paisaje, enmarcando los cerros orientales, las torres del parque y el tradicional centro internacional.
La fachada en concreto rojo fundido in situ, busca mimetizarse con los edificios que rodean el proyecto y jugar con el contraste de los colores naranja (edificios) y verde (montañas) que ya tenía la zona.
Área: 2100m².
Fecha de construcción: 2018-2019
Diseño arquitectónico: Taller de Arquitectura de Bogotá/Daniel Bonilla Arquitectos – Daniel Bonilla y Marcela Albornoz.
COLEGIO SAN JOSÉ, PREESCOLAR
Cajicá, Colombia.
El edificio de Preescolar del Colegio San José en Cajicá plantea una serie de volúmenes puros implantados en el terreno como respuesta al contexto natural en el cuál se encuentran situados. Cada volumen alberga dos salones, uno en primer piso y otro en segundo piso. Estos se articulan por una circulación cubierta que rodea el patio a manera de claustro, generando una relación espacial y visual entre los volúmenes y su entorno. A su vez, cada salón tiene una terraza posterior la cual se convierte en el vínculo con el exterior y la naturaleza, relación esencial para cada uno de los habitantes del edificio.
Las jerarquías de los usos se obtienen por medio de la variación en la volumetría y tamaño de las edificaciones que componen el claustro. De esta manera, el proyecto cuenta con dos volúmenes de mayor tamaño los cuales albergan el área administrativa y salones de carácter múltiple y a su vez se convierten en la portada del edificio, puesto que genera una imagen imponente y distintiva. Por otro lado, en los volúmenes más pequeños se encuentran los salones de clase y áreas de servicio complementario para los estudiantes y docentes. Gracias a la escala e independencia de cada uno de estos volúmenes, se garantiza la flexibilidad del uso y apropiación de los diversos espacios dentro del proyecto.
Adicionalmente, una de las grandes virtudes de haberse proyectado como edificios independientes es que da la posibilidad de que se pueda construir por medio de etapas garantizando que nunca se vaya a ver como un proyecto inconcluso.
Para lograr destacar la imagen y volumetría exterior del proyecto, se tomó como referencia de material el pañete rústico utilizado en la casona de Administración existente del Colegio San José. Este material proporciona un acabado texturado el cual, gracias al juego de luz y sombras, enmarca de manera sensible las formas que rigen la geometría del conjunto. En complemento al pañete texturizado, el concreto ocre, la madera y el metal hacen parte de los materiales principales utilizados para dar acabado y forma a este proyecto, brindando un ambiente cálido que invita a ser habitado.
Tanto las áreas interiores como exteriores del edificio, se plantearon con una paleta de colores de tonalidad tierra inspiradas en el paisaje y arquitectura campestre de la zona. Esto también surge con el fin de buscar cierta sobriedad dentro del entorno lúdico y así los acentos de color se dieran por medio del amoblamiento y la apropiación de cada uno de los salones y espacios.
El proyecto se plantea como un espacio de aprendizaje, que busca prolongar la actividad interior de a un exterior complementario y natural. Todos los salones se comunican con un espacio verde o balcones con tobogán para los niños. Igualmente, sobre las áreas de circulación cubierta se plantean una serie de espacios comunales que rodean el patio central y jardines, convirtiéndolo en un escenario para eventos especiales y cotidianos.
Área: 1287m2 en primera etapa, 2258m2. 3545m2 en total.
Fecha de construcción: 2015-2016.
Diseño arquitectónico: Taller de Arquitectura de Bogotá, Arquitectos Daniel Bonilla y Marcela Albornoz
Ubicación: Cajicá, Colombia.
Fotografías: Rodrigo Dávila.
